Seleccionar página

Y que la miel se torne amarga,

y que se vuelvan arenas las aguas,

y que rapaz sea el ruiseñor

y que el sol, oscuro,

y que la luna, negra.

Y que se sequen los prados,

y que mi corazón, sal y piedra.

Y que si yo un día te olvidara…

Y que fuera plaga la cosecha.